Con el avance del proceso de vacunación -este fin de semana se han puesto más de un millón de dosis- van descendiendo los contagios, los ingresos y los fallecimientos entre la población más mayor, y cada vez se reducen las edades de las personas que siguen sin estar protegidas, porque aún no les llegado el turno del pinchazo. Cada vez son más jóvenes y el Ministerio de Sanidad ha señalado este lunes dos "hitos" importantes de las últimas semanas que han terminado en un aumento de positivos: las fiestas de fin de Bachillerato y por terminar la EVAU.

El director del CCAES, Fernando Simón, ha señalado al "fin de los cursos académicos, el Bachillerato y el fin de la EVAU y las celebraciones posteriores" como los eventos responsables de que la epidemia esté "estabilizada" o incluso se incremente entren los grupos más jóvenes. 

Se trata, ha dicho, de una "relajación entendible pero probablemente excesiva" que está frenando la evolución descendente de la epidemia en todo el país. Curiosamente, las diferencias entre comunidades siguen existiendo pero se van reduciendo y, por el contrario, aumenta la diferencia entre grupos de edad, con una incidencia que ahora es mayor en los más jóvenes. Porque aún no están vacunados y también por su comportamiento.

"Tenemos que seguir siendo conscientes de que el coronavirus sigue estando ahí", ha advertido Simón, que ha reconocido que, tratándose de gente cada vez más joven, tiene "menor impacto porque hay menos UCIs, hospitalizaciones y mortalidad" pero ha señalado que "también la tiene" y que cuando se produce "tiene un impacto social incluso mayor que cuando sucede en personas más mayores".